En el caso de Aduana, el edificio ganador del segundo lugar obtuvo el puntaje máximo en el requerimiento de consumo de energía, mientras que la comisaría, ganadora del tercer lugar, recibió máxima distinción en la categoría de consumo eficiente de agua.
Sin duda, la zona centro-sur del país fue la gran protagonista de la sexta edición de los premios CES, dado que el segundo lugar se quedó en la Región del Biobío, específicamente en el Edificio Institucional de la Dirección Regional de Aduanas de Talcahuano (D.R.A.T.), mientras que la tercera posición, se quedó en la Región del Maule, en la Subcomisaría de Longaví. Estos son los detalles de cada recinto.
Aduana en Talcahuano
Merecedor del segundo lugar, el edificio de Aduanas ostenta una superficie de casi 1.400 metros cuadrados construidos; alcanzando un puntaje de 72,5/100, lo que lo califica en el nivel de Certificación Sobresaliente.
El Servicio Nacional de Aduanas trabajó con la Dirección Regional de Arquitectura del Biobío, con Prado Arquitectos, Francisco Pizarro como asesor CES, 88 Ltda. como Entidad Evaluadora y Gabriel Fernandez de la Maza como constructor.
En su construcción, destacan las estrategias de diseño pasivo para el uso de iluminación natural y la incorporación de diseño y equipamiento eficiente de los sistemas que consumen agua, lo que se traduce en que los recintos con iluminación natural óptima superen el 75% de la superficie, una importante reducción de los consumos de energía para climatización e iluminación (superior al 41%) y una gran disminución del uso de agua potable para consumo humano, superior al 70%.
Hugo Cautivo, Seremi MOP Biobío, menciona que la certificación sobresaliente en CES va en la “línea de nuestro gobierno de construcciones que son sustentables, amigables con el entorno”.
En tanto, Juan Andrés Vega, director regional de Arquitectura, y Margot Vallejos, inspectora fiscal, destacan que las estrategias de sustentabilidad están dadas por la orientación. “Si bien era un pie forzado en la habilitación del edificio, la orientación de las oficinas hacia la fachada nororiente, protegiendo del exceso de sol mediante celosía, son parte de una fachada ventilada, ahorrando con estas medidas pasivas, el consumo eléctrico, ya sea por iluminación o por ventilación”.
Vega añade que la incorporación de dos patios interiores aporta luminosidad a los pasillos internos del edificio, lo que “unido a los tabiques vidriados otorga un aporte de iluminación que ayuda a la baja de consumo eléctrico por este ítem”.
Katherine Ampuero, directora regional de Aduana Talcahuano, agradece a la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, “que nos permite, a través de este proyecto de infraestructura, poder ganar este premio, que se inserta dentro de los compromisos que tiene el Servicio Nacional de Aduanas y el Estado Verde de gobierno”.
Andrés Barrientos, director (S) de Aduana Talcahuano, manifestó que el nuevo edificio constituye el anhelado hogar laboral para los funcionarios de esta institución, luego de años de pasar por varias construcciones.
En palabras de Barrientos, “nos sentimos orgullosos del edificio porque nos da una calidez y un lugar de trabajo muy hermoso, muy renovado, con muchas características que hacen que uno esté contento acá: la luminosidad, los espacios de esparcimiento, las salas donde tomamos el desayuno, hacemos la colación, cada una de las ubicaciones que tienen los funcionarios tienen su propia sistema de calefacción”, por lo que hoy los usuarios disfrutan más pasar tiempo en su espacio de trabajo.
Para el asesor CES de FP Energy, Francisco Pizarro, este proyecto les planteó un desafío importante, puesto que se trataba del reciclaje de dos edificios, “uno de los cuales era una bodega de almacenaje de Aduanas, La idea principal que tuvimos como equipo de diseño fue lograr la mejor iluminación posible en los espacios de oficinas. En ese contexto, se generaron estos patios de luz, que además le entregara a los usuarios del edificio un espacio de recreación y contemplación”.
El asesor CES Iván Orellana, añade otra limitante del proyecto: “el galpón existente limitaba la altura total del edificio, por lo tanto, inhabilitaba el poder tener en el cielo las instalaciones de clima, por eso se generaron clósets, que dividen los espacios de oficinas, que contienen la distribución de la central térmica, que se trata de un chillier polivalente, de alta eficiencia, como también la distribución del sistema central de ventilación mecánica”.
Subcomisaría de Longaví
Con este recinto, Carabineros de Chile se hace presente en cuatro de las seis ceremonias de los Premios CES. Con el diseño de BIS Arquitectos, la asesoría CES de Fernanda Soto y la evaluación de EBP Chile, la nueva comisaría cuenta con más de 1.200 metros cuadrados de superficie construida y obtuvo el tercer mayor puntaje, con 71/100 puntos, alcanzando el nivel de Certificación Sobresaliente. En tanto, la construcción estuvo a cargo de Angel Bartolomé Cecchi Ltda.
En ella, destacan las estrategias de diseño pasivo para la reducción de las necesidades de uso de energía y agua, lo que se traduce en una reducción de la demanda de energía para climatización e iluminación de casi el 30%, una gran disminución del uso de agua potable para consumo humano, superior al 42% y una enorme reducción del uso de agua potable para riego de paisajismo, superior al 70%.
El arquitecto a cargo, Nicolás Martínez de BIS Arquitectos, destaca la relevancia del desarrollo de la arquitectura pública y del estudio de estrategias para mejorar la calidad de los edificios y su habitabilidad. “Es muy importante para nosotros incorporar las estrategias CES; hemos estado hace algunos años participando en estos concursos, aplicando las estrategias y nuestra idea es ir mejorando y hacer que nuestros edificios tengan mejor categoría”, indica.
Para el capitán de Carabineros y subcomisario de Longaví, Diego Rivera Bravo, las principales características de la nueva comisaría son “un buen espacio, con un buen confort para los que trabajamos al interior, una buena aislación térmica que permite que las temperaturas sean adecuadas tanto en verano como en invierno, la iluminación adecuada que permite mantener lugares visibles en todo momento, sin necesidad de usar de forma exagerada la luz eléctrica”. Asimismo, como usuario, agradece que el edificio haya sido bien pensado para su función de comisaría, lo que resulta en espacios cómodos y de buena amplitud para organizar de mejor manera el espacio en el día a día.
La Entidad Evaluadora de este proyecto fue EBP Chile. En su representación, Julio Duarte destaca el orden en la entrega de la documentación por parte de la asesora CES Fernanda Soto. “Su característica principal es su forma compacta y cómo organiza su zonificación interior con recintos principales hacia el norte. Por otra parte, cuenta con una buena envolvente con una buena aislación trópica continua, marco de PVC, y una buena relación entre marco de ventana y protecciones solares, según su orientación”, puntualiza.
Y añade que gracias a esto, “se obtienen excelentes resultados de iluminación, demanda térmica y confort interior, priorizando un diseño pasivo adecuado con ventilación natural y sistemas de climatización individuales y eficientes. Quiero destacar también el espacio exterior, con la adición de especies de bajo consumo hídrico y un sistema de riego automatizado, obteniendo así resultados significativos de ahorros en agua potable destinada a paisajismo”.