Mejor Escuela: avanzamos en Eficiencia Energética en edificaciones

Por Vittorio Tronci, jefe de la Unidad de Edificación de Ciudades del Ministerio de Energía

Como Ministerio de Energía, estamos trabajando en la implementación de la Ley de Eficiencia Energética, la cual en sus artículos 3 y 4 referidos a edificaciones, presenta desafíos significativos, especialmente en lo que respecta a la certificación de construcciones existentes. 

Actualmente, la Calificación Energética de Viviendas sigue siendo un instrumento voluntario y entrará en vigor con la ley, una vez se cumplan los tiempos de toma de razón por la Contraloría. Sin embargo, la obligatoriedad aplicará a los edificios nuevos que incluyan publicidad de venta, sin considerar las edificaciones antiguas o existentes, lo que representa un desafío en el marco normativo.

Como institución, queremos avanzar generando proyectos demostrativos para la renovación energética del parque construido. En ese sentido, uno de los referentes más exitosos ha sido el Programa Mejor Escuela, que busca mejorar el acondicionamiento térmico de las escuelas y liceos de Chile con eficiencia energética.

Con un presupuesto de 19 mil millones de pesos, financiados por un fondo de infraestructura verde de la Dirección de Presupuestos (Dipres), este proyecto se ha transformado en un referente en la renovación energética de edificios existentes, respondiendo transversalmente a muchos de los temas que están considerados tanto en la Ley de Eficiencia Energética, como en los acuerdos establecidos dentro de la Agenda de Energía, que es la hoja de ruta de nuestro quehacer institucional. 

Mediante la mejora de la envolvente térmica y la incorporación de atributos de eficiencia energética, Mejor Escuela, busca elevar los estándares de construcción y fomentar la competencia en el sector, con un impacto directo en mejorar la calidad de vida de las y los estudiantes de educación pública.

Un punto clave de este trabajo es la colaboración con la Certificación de Edificio Sustentable (CES), donde el Ministerio busca certificar al menos dos escuelas como pilotos de la nueva versión enfocada en edificaciones existentes. Este paso demuestra un compromiso con la certificación de construcciones, superando incluso las brechas normativas.

Es así, que, como Ministerio de Energía, no solo cumplimos con los requisitos establecidos, sino que también estamos liderando el camino hacia estándares superiores en la eficiencia energética de las edificaciones en nuestro país.

Certificaciones nacionales contribuirán a la masificación de la CEEUP

En enero del 2021 se aprobó la Ley de Eficiencia Energética que obliga a las inmobiliarias, constructoras y a proyectos de vivienda pública a usar la Calificación Energética de Vivienda (CEV) y deja consignado un plazo de 4 años para que se desarrolle y entre en operación la Calificación Energética de Edificios de Uso Público (CEEUP).

Esta ley establece la obligatoriedad de etiquetado energético de viviendas a partir del año 2023 y de edificios de uso público, comercial y oficinas a partir del año 2025.

En este sentido, el Instituto de la Construcción (IC) ha liderado el desarrollo de los estudios que permitirán la creación de ésta última calificación de edificios, coordinada e integrada a la Certificación Edificio Sustentable (CES), a través de un trabajo colaborativo en base a un comité técnico conformado por profesionales de los ministerios de Vivienda, Energía y Obras Públicas.

Yoselin Rozas, profesional de la Unidad Edificación y Ciudades de la División de Energías Sostenibles, del Ministerio de Energía, señala que “la colaboración del IC junto a los ministerios en este tipo de estudios permite una mirada que integra los ámbitos público y privado, además de la colaboración con la academia, consultores, y actores relacionados”.

Paola Molina, presidenta del Comité de Economía Circular del IC y presidenta del Directorio de la Certificación CES, señala que la Certificación CES -administrada por el IC- considera dentro de sus variados requerimientos, la demanda de energía, por lo que se vuelve muy necesario el desarrollo de una Calificación Energética de Edificios de Uso Público que permita estandarizar y visibilizar en el sector, la demanda energética de dichos edificios.

”En el proceso de formulación de la CEEUP, ha sido relevante la colaboración desde CES porque ha sido posible traspasar la experiencia y conocimientos de los edificios de uso público adquirida durante los años de funcionamiento, y de esta manera se han incorporado algunas de las condiciones base para la evaluación de edificios, tales como cargas internas, ocupación, desagregación por tipo de uso, entre otras”.

Por otra parte, la Certificación de Vivienda Sustentable (CVS), liderada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), y administrada por CTeC, contribuye a la labor que desarrolla la Calificación Energética de Vivienda (CEV), fomentando este sistema como herramienta de evaluación de los aspectos de eficiencia energética de las viviendas en Chile.

Allan Ubilla, coordinador de proyectos de CTeC, señala que la CEV, además de ser por sí sola una herramienta de evaluación energética de viviendas, es el único instrumento de evaluación de los requerimientos de confort térmico pasivo y de reducción de demanda térmica de la Certificación de Vivienda Sustentable (CVS), los cuales, a su vez, son requerimientos obligatorios para acceder a cualquiera de los 3 niveles de certificación que ofrece la CVS. Y esto aplica para las 3 macrozonas que diferencia el sistema CVS.

“Hasta ahora esta calificación es voluntaria, pero con la nueva Ley de Eficiencia Energética ya promulgada y que entrará en vigencia prontamente, se hace obligatorio que las edificaciones, incluyendo viviendas, cuenten con una calificación energética y su etiquetado para obtener la recepción final, por lo que las empresas tendrán prontamente la obligación de calificar sus proyectos”.

Certificaciones nacionales

Las Certificación Edificio Sustentable CES y la Certificación de Vivienda Sustentable CVS incluyen varios aspectos para su análisis como energía, agua, confort, residuos, etc., y las calificaciones energéticas CEV y la futura CEEUP, se enfocan específicamente en el requerimiento de energía y las emisiones que este genera, de manera más detallada, sirviendo para validar este punto con mayor precisión en las certificaciones antes mencionadas.

“Hoy tenemos que estar orgullosos con las herramientas que se han y están levantando en nuestro país, porque están adaptadas a los requerimientos locales y permiten disponer de los recursos necesarios para avanzar en la industria de manera asertiva y pertinente a todos los desafíos que hoy se le plantean para el sector tanto a nivel nacional como mundial. El hacerlo oportunamente, permite una máxima eficiencia y costo, además de una óptima calidad de vida para los usuarios finales”, indica Paola Molina.

Yoselin Rozas, señala que “la Calificación Energética de Viviendas y Edificios formará parte de ambas certificaciones, permitiendo acreditar el ítem de energía, es decir, cuando un mandante decide certificar un proyecto, como parte del proceso de certificación obtendrá también la calificación energética. De esta manera, la contribución de CES y CVS a la calificación es directa”.

“Hay varios beneficios para los usuarios finales de viviendas calificadas y/o certificadas. Primero, al fomentar mejoras en las viviendas en pos de la eficiencia energética a través de la CEV y CVS, el confort térmico al interior debería mejorar ostensiblemente en comparación con una vivienda con los estándares mínimos que establece la OGUC. Asimismo, los gastos operacionales de los usuarios, posiblemente, se verán reducidos por requerir menos energía para calefacción y enfriamiento. Por otro lado, hay algunos instrumentos crediticios para aquellos proyectos que tengan CEV o CVS, lo que ayuda a la ciudadanía a acceder a proyectos más eficientes y sustentables”, agrega Allan Ubilla.

Desafíos

Paola Molina, presidenta del Comité de Economía Circular del IC y presidenta del Directorio de CES, señala que el principal desafío hoy es levantar los estándares mínimos de la Calificación Energética de Vivienda, ya que la letra menor de acuerdo con nuestra actual reglamentación térmica para viviendas es la E, la cual es bastante deficiente en términos de lograr una calidad ambiental térmica interior.

“Con la esperada pronta actualización de la Reglamentación Térmica, este estándar debiese subir a la letra C y D como mínimo, lo que implica lograr estándares valorados internacionalmente que permitan una adecuada calidad térmica del ambiente interior para todas las personas, lo que tiene un gran impacto positivo en el ámbito social y ambiental”.

Sin embargo, también es importante que todo el sector releve esta herramienta de manera oportuna para hacer las adaptaciones necesarias y lograr los mejores resultados. “Tratar de asimilar esto a presión y contra el tiempo, puede conducir a malos resultados, que perjudiquen a inmobiliarias, constructoras, usuarios finales y al país”, agrega Paola Molina.

Allan Ubilla, coordinador de proyectos de CTeC, comenta que este año 2022 se comenzará a trabajar en conjunto con el Minvu para extender la CVS a viviendas existentes y, “más adelante, esperamos también integrar la certificación de la etapa operacional de las viviendas. Si bien se trata de una certificación nueva, a la fecha ya cuenta con 105 proyectos registrados correspondientes a 17 mil unidades de vivienda con una cobertura en 11 regiones; 4 proyectos precertificados y 2 certificados.

Por su parte, en CES también se encuentran trabajando en la versión de edificios existentes y en sumar la versión de CES Aeropuertos a las ya existentes.

Finalmente, Yoselin Rozas comenta que la implementación de la Calificación Energética de Edificaciones tiene importantes desafíos para su masificación “entre ellos, el fortalecimiento de las herramientas que permitirán su correcta implementación una vez que sea obligatoria; la educación y difusión a consumidores y actores relacionados; la gestión de los datos para el cumplimiento de los compromisos internacionales; y un punto que nos parece muy relevante es el reconocimiento a nivel nacional de la Calificación Energética de Edificaciones como un referente de herramienta de medición de la eficiencia energética de las edificaciones”.

Fuente: Instituto de la Construcción

Se abre consulta pública sobre reglamentos para Edificaciones en Ley de EE

  • El Ministerio de Vivienda y Urbanismo tiene abierto dos procesos de consulta en el marco de la Ley de Eficiencia Energética.
  • La consulta del reglamento del Registro Nacional de Evaluadores Energéticos, abierta hasta el 10 de junio; y el reglamento para la Calificación Energética de Viviendas abierto hasta el 22 de junio.
  • Pueden participar personas naturales o jurídicas, empresas, organizaciones sociales, universidades, entre varias.

La ley 21.305 sobre Eficiencia Energética recientemente promulgada, cuyo objeto es promover el uso racional y eficiente de los recursos energéticos, considera diversos procesos participativos. Uno de ellos es la revisión de su implementación a través de sus reglamentos.

La ley contiene iniciativas fundamentales para el desarrollo de la eficiencia energética en Chile, entre los cuales se cuenta el etiquetado energético de toda edificación nueva, lo que permite incorporar la variable de eficiencia energética en la decisión de compra de los consumidores. De esta manera, las personas podrán tomar una decisión informada a la hora de comprar una vivienda.

En su artículo 3, la ley establece que la calificación energética de viviendas, edificios de uso público, comercial y oficinas, será obligatoria para la obtención de la recepción municipal final o definitiva. Esto regirá para proyectos desarrollados por empresas constructoras e inmobiliarias y por los Servicios de Vivienda y Urbanización, debiendo además incluirse la etiqueta de eficiencia energética en toda publicidad de venta que realicen.

Para abordar lo antes mencionado, la ley establece la creación de 3 reglamentos, de los cuales 2 de ellos permitirán la entrada en vigencia de la calificación energética obligatoria.

Uno de ellos es el artículo 3, que mandata al Ministerio de Vivienda y Urbanismo a desarrollar el Reglamento que regule el procedimiento, exigencias y condiciones del otorgamiento de la calificación y precalificación energética y su publicidad, el que será suscrito por el Ministerio de Energía.

Además, el artículo 4 que crea el Registro Nacional de Evaluadores Energéticos, para efectos de la aplicación de la Calificación Energética, mandatando al Ministerio de Vivienda y Urbanismo a reglamentar: los requisitos de inscripción; las causales de inhabilidad e incompatibilidad para inscribirse y mantenerse en él; las entidades o profesionales que podrán efectuar la evaluación para la emisión del informe y etiquetado; los mecanismos para su evaluación; acreditación y registro; las competencias para fiscalizar el cumplimiento de las exigencias establecidas en calificación energética y el proceso de etiquetado, entre otros aspectos.

En este contexto, se invita a opinar sobre la propuesta de reglamento sobre “Registro Nacional de Evaluadores Energéticos” y “Calificación Energética de Viviendas en Chile”, a que se refiere la ley N° 21.305.

La consulta pública del reglamento sobre “Registro Nacional de Evaluadores Energéticos” se encuentra abierta desde el 12 de mayo y hasta el 10 de junio de 2021 a las 23:59 horas.

La consulta pública del reglamento sobre “Calificación Energética de Viviendas en Chile” se encuentra abierta desde el 24 de mayo y hasta el 22 de junio de 2021 a las 23:59 horas.

Documentos en consulta disponibles en:

Consulta pública del reglamento sobre “Registro Nacional de Evaluadores Energéticos”

https://participacionciudadana.minvu.gob.cl/consultas-ciudadanas-virtuales/consulta-p%C3%BAblica-sobre-reglamento-del-registro-nacional-de-1

Consulta pública del reglamento sobre “Calificación Energética de Viviendas en Chile”

https://participacionciudadana.minvu.gob.cl/consultas-ciudadanas-virtuales/consulta-p%C3%BAblica-sobre-reglamento-para-la-calificaci%C3%B3n-energ%C3%A9tica-de

Fuente: Ministerio de Energía

Ley de Eficiencia Energética: construcción sustentable y cambio climático

Chile es un país altamente demandante de energía. Por eso, la gestión del recurso y el etiquetado energético de edificaciones fueron prioridades en la elaboración de la nueva normativa que apuntará a mitigar los efectos del cambio climático.

En el webinar “Iniciativas que mejoran la sustentabilidad de la edificación en Chile”, organizado por los ministerios de Energía y Obras Públicas, junto con el Instituto de la Construcción y Certificación Edificio Sustentable (CES), se abordó el contexto e implementación de la Ley 21.305, sobre eficiencia energética. Gabriel Prudencio, jefe de la División de Energías Sostenibles del Ministerio de Energía, expuso una serie de antecedentes sobre el consumo de energía en Chile.

El profesional hizo hincapié en la necesidad de lograr una transición energética eficiente y vinculada a la construcción sustentable, con miras a mitigar el impacto del cambio climático. “La realidad del consumo energético en Chile refleja que un 22% de ésta corresponde a uso residencial, público y comercial; 36% a transporte y 38% a industria y minería”, detalló Prudencio. En este sentido, se refirió a la importancia de institucionalizar la eficiencia energética, es decir, formalizar una visión país a través de un Plan Nacional de Eficiencia Energética, actualizado cada cinco años, que incluyera procesos participativos y fuera aprobado por el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad.

Además, el especialista explicó que nuestro país debe hacerse cargo, al menos, de tres grandes consumos energéticos:

– Gestión energética de los grandes consumidores: hacer una gestión activa del gasto de energía. Éstos deberán informar anualmente sus consumos y, además, las empresas con mayor consumo de energía deberán implementar un Sistema de Gestión de la Energía (SGE), fiscalizado por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles.

– Estándares de eficiencia para vehículos: la ley pretende promover la renovación del parque vehicular con automóviles más eficientes, fijando estándares para vehículos livianos, medianos y pesados. Tanto los importadores como los representantes que comercializan estos automóviles, deberán cumplir con ese estándar para el promedio de los vehículos que puedan vender cada año.

– Etiquetado energético de edificaciones: para que los usuarios cuenten con mejor información al momento de comprar un inmueble, es que se instauró la calificación energética o etiquetado de todas las edificaciones nuevas. Esto incluye viviendas, pero también edificios de uso público, edificios comerciales y oficinas. El etiquetado deberá obtenerse antes de la recepción final del inmueble y con la opción de una precalificación de las etapas anteriores para fines publicitarios, siendo mandatados a cumplir con esta obligación tanto las empresas constructoras e inmobiliarias como los servicios de vivienda y urbanismo en todo Chile.

“Esta información sobre la eficiencia o el consumo energético que tendrá la calificación no necesariamente exige el cumplimiento de un estándar mínimo, sino más bien constata justamente cómo son los usos energéticos de la vivienda en el tiempo”, explicó Gabriel Prudencio.

En 12 meses, debiera estar creado el Reglamento de Calificación de Viviendas y, asimismo, en un año, debería establecerse el Reglamento de Evaluadores Energéticos. Asimismo, la nueva norma fijó un plazo de 36 meses para desarrollar el Reglamento de Calificación de Edificios de Uso Público, Comerciales y Oficinas.

De aplicarse todas las medidas contempladas en la ley, el Ministerio de Energía estima una reducción de intensidad energética del 10%, un ahorro acumulado de US$15.200 millones y una reducción de 28,6 millones Ton CO2. El Plan Nacional de Eficiencia Energética se revisará cada cinco años y considerará edificación, transporte, ciudades inteligentes, sectores productivos, educación y capacitación, entre otros aspectos, con un enfoque participativo.

Los avances que impulsan la sustentabilidad de la construcción como política pública

Representantes del sector público y privado participaron en un webinar, en el que destacaron el papel de la certificación CES en la eficiencia energética y su amplia proyección en la construcción sustentable de edificios. 

El cambio climático representa un gran desafío para la construcción, pero también la oportunidad de jugar un rol clave, tanto en la adaptación como en la resiliencia de las ciudades. De hecho, según Katherine Martínez, subgerenta de Desarrollo de la CDT, se estima que la construcción y operación de edificios se relaciona al 36% del uso final de energía global y cerca del 39% de las emisiones de CO2 relacionadas. 

En ese contexto, se realizó el webinar “Iniciativas que mejoran la sustentabilidad de la edificación en Chile”, organizado por CES, el Ministerio de Energía, la Dirección de Arquitectura del MOP, el Instituto de la Construcción, y producido por la CDT, que concluyó que descarbonizar el sector es una de las formas más efectiva de mitigar los potenciales efectos del cambio climático. 

En el encuentro participaron el director nacional de Arquitectura del MOP, Raúl Irarrázaval; el jefe de la División de Energías Sostenibles del Ministerio de Energía, Gabriel Prudencio; el presidente de CES; Ricardo Fernández; el jefe de CES, Hernán Madrid; y la asistente de CES, Romy Luckeheide; junto a la jefa del Departamento de Construcción Sustentable de la Dirección de Arquitectura del MOP, Margarita Cordaro; y Bárbara Rodríguez, profesional de la Unidad Edificación y Ciudades de la División de Energías Sostenibles del Ministerio De Energía. 

“No da lo mismo cómo consumimos y generamos la energía. Ello puede generar un impacto en la calidad de vida, por los ahorros y la productividad”, señaló Gabriel Prudencio, en representación del Ministerio de Energía, quien también se refirió a las implicancias de la Ley de Eficiencia Energética.

Por su parte, el director nacional de Arquitectura del MOP, Raúl Irarrázabal, destacó los beneficios ambientales de la gestión energética en edificaciones. “El MOP confía plenamente en una edificación pública sustentable y esto no es un discurso, es algo real y concreto”, dijo. 

En este sentido, la autoridad del MOP, comentó que utilizar la energía adecuadamente es tarea de todos. Por eso, su gestión se ha incorporado como una política pública. “El 38% de los bonos verdes que emitieron desde Hacienda vienen, justamente, de la certificación CES y, en gran medida, de los edificios que construye la Dirección de Arquitectura. Los efectos de esta política ya se están viendo y espero que se profundicen”, comentó. 

Enseguida, el presidente del Comité Directivo de la Certificación Edificio Sustentable, Ricardo Fernández, recordó la importancia de socializar los avances relacionados con el trabajo del convenio de colaboración Minenergía, DA MOP y CES, “Llevamos algo más de dos años, entre otras cosas, tenemos mejoras y nuevas versiones de CES, nuevos resultados en nuestra plataforma CES y la versión CES 1.1; ediciones reales, mostrar los beneficios de los edificios certificados CES. Estamos con iniciativas para la línea de base del carbón y el desarrollo de archivos climáticos. Ya podemos proyectarnos como referente en construcción”, cerró. 

En el webinar, Margarita Cordaro del MOP, se refirió a la sustentabilidad en la edificación pública, a través de los bonos verdes soberanos y otras iniciativas en el marco de la construcción sustentable. Asimismo, Bárbara Rodríguez y Hernán Madrid explicaron los alcances del Estudio 1 (de tres) para la Calificación Energética de Edificios de Uso Público, comerciales y oficinas, ejecutado en el marco del Convenio por un equipo de la UBB.

Al finalizar, Hernán Madrid adelantó los cambios que presenta la actualización  del Manual CES versión 1.1, que se presentará en los próximos meses, en tanto que Romy Luckeheide presentó la nueva plataforma de CES y cómo los asesores tendrán que interactuar con ella, así como las nuevas funcionalidades que trae.

El webinar está disponible AQUÍ.