Segundo y tercer lugar de los Premios CES se quedaron en el norte

El Edificio Consistorial de Chañaral y el Hospital de Alto Hospicio fueron los seleccionados por sus grandes aportes en eficiencia energética y ambiente interior.

Con casi 1.750 metros cuadrados de superficie construida total, el segundo lugar de los Premios CES en la categoría Edificio Certificado correspondió al Edificio Consistorial de Chañaral, de la región de Atacama, que corresponde a la obra de mayor envergadura e importancia que se ha realizado en la ciudad y el municipio. Obtuvo 61,5 de 100 puntos durante el año 2022 y alcanzó el nivel de Certificación Destacada.

Se encuentra ubicado en el casco histórico de Chañaral y alberga a su Municipalidad. El diseño de este edificio le permitió obtener el puntaje máximo en la categoría de consumo de agua, en línea de lo que se espera de un edificio ubicado en la región de Atacama.

La superficie edificada es de 3.025 m2 distribuidos en tres pisos de hormigón armado sobre superficie natural más estacionamiento subterráneo y zona de bodegas. El Edificio Consistorial es la única infraestructura del lugar que posee dos ascensores, rampa de acceso universal e instalaciones de última tecnología, siendo la sustentabilidad uno de sus principales atributos.

Entre los materiales utilizados sobresale la piedra, elemento característico de la zona, otorgando al edificio una identidad propia de la industria de la zona minera del norte. Asimismo, el techo también es un punto destacado. Al ser semitransparente, se puede observar el faro, símbolo indiscutido de Chañaral. En resumen, se trata de una edificación de alto estándar, que no sólo revitalizará el sector del casco histórico, sino que también cumplirá con el propósito de albergar todos los servicios de la municipalidad para entregar un mejor servicio a la comunidad.

El director de SECPLA de la Municipalidad de Chañaral, Oscar Nieto, compartió algunos aspectos relevantes respecto a la construcción del Edificio Consistorial, como la luz natural, la grifería con temporizadores y el sistema de iluminación fotovoltáica, entre otros: “Quisimos incorporarnos al sistema de edificación sustentable porque nuestra comuna ha sido históricamente afectada por la contaminación ambiental, tenemos un vacío ambiental significativo, y la verdad es que a través de este proyecto quisimos dar una señal con respecto a la mirada que tenemos sobre las construcciones futuras y proyectos amigables con el medio ambiente. Qué mejor que nuestro Edificio pueda tener esas características para disfrutar de sus bondades”. La visión desde el municipio seguirá plasmándose en próximas planificaciones, como la Reposición de un antiguo colegio, cuyos diseños ya están siendo diseñados incorporando las características CES.

La entidad evaluadora fue EBP Chile desde donde José Jodar comentó que: “la revisión de la construcción del Consistorial destacó por la calidad de la documentación entregada por la constructora (Crisosto Smith Arquitectos) y la revisora CES, Fernanda Soto, lo cual ayudó mucho en la revisión del proceso constructivo y del cumplimiento de los requisitos CES a los que postulaba el edificio”. 

“De las características del proyecto destacan los elementos de protección solar incluidos en la envolvente térmica, que busca reducir la demanda de refrigeración; equipo bomba calor para climatización con un bajo consumo energético, buenos niveles de iluminación natural y ventilación natural, pensando en el confort de los usuarios, y además logra reducir en gran medida el consumo de energía”, destacó.

Por su parte, la Alcaldesa de Chañaral Margarita Flores, compartió su emoción por el premio y el valor que le entrega a quienes componen el gobierno de su ciudad, al hacerle la vida más grata y en excelentes condiciones para atender a los usuarios de la mejor manera posible. 

Hospital de Alto Hospicio

También en el norte se quedó el tercer lugar de los premios, el cual fue para el Hospital de Alto Hospicio, en la región de Tarapacá. El edificio cuenta con más de 38.000 metros cuadrados de superficie construida total y obtuvo el tercer mayor puntaje, alcanzando el nivel de Certificación Destacada.

El Hospital cuenta con grandes beneficios derivados del ahorro en energía y agua, confort ambiental interior y un óptimo manejo de los residuos. Su modelo eficiente y sustentable deslumbra por su diseño paisajístico de vegetación de bajo requerimiento hídrico, que permite un significativo ahorro en la demanda de agua potable de hasta el 80%. Su capacidad es de: 235 camas, 7 pabellones quirúrgicos, 3 salas de parto integral, 12 sillones de diálisis, 7 sillones dentales, 18 box consultas médicas, 10 box profesionales, 14 de procedimiento y 9 de urgencias.

Luis Vallejos, inspector fiscal de la Dirección de Arquitectura de la región de Tarapacá, menciona que la certificación se basa en la implementación de equipos con alta eficiencia energética, en climatización y energía eléctrica, así como un sistema pasivo, basado en sistema EIFS, para evitar pérdidas térmicas y ganancias no deseadas. “Tenemos un control de asoleamiento, en base a lamas verticales de aluminio, que también permiten el control lumínico y aportar a la certificación”, sintetizó.

Por su parte, Alex Mollá, arquitecto de Bbats Consulting & Proyects señaló: “El proyecto de Alto Hospicio supuso un reto muy importante para nuestra oficina por tres asuntos muy importantes: la ubicación, en una zona desértica, lo que supone grandes cambios de temperatura del día a la noche y fuertes vientos. Otro punto importante es que no podíamos utilizar una tecnología clásica porque tiene mucha exposición solar y en tercer lugar, la ubicación: no podíamos realizar el proyecto como si fuese en un entorno urbano, si no que teníamos que buscar otro tipo de arquitectura”. 

Al proyectar el hospital, el arquitecto comparte que buscó en los orígenes, en la arquitectura aymara, dónde ésta ocupaba la protección solar, no sólo para proteger, sino también protegían las fachadas de sus edificios con sombra para disminuir la temperatura del exterior y el interior, de esa forma podían tener temperaturas mucho más agradables: “esto lo aplicamos en el hospital para tener menos temperatura al interior, de tal manera que el gasto energético, fuera menor”. 

Asimismo, hacían con sus ropas de colores para protegerse del sol, en el Hospital el color es el envolvente, provocando sombra dentro del edificio. De tal forma se baja la temperatura exterior y la interior. Y un patio interior recibe luz natural. La arquitectura del edificio es efímera, respeta su entorno sin ser un elemento contundente en él y cuenta con vegetación autóctona que no tiene gran gasto energético.

“Lo que estamos haciendo es no buscar la certificación CES, sino buscar una certificación CES Destacada. Nos hemos dado cuenta que construir para CES, con eficiencia energética es, al final, hacer buena arquitectura”, concluyó el profesional. 

En tanto, Fabián Guzmán, coordinador de la asesoría CES añadió: “El diseño del envolvente de alta eficiencia, responde a las exigentes condiciones de su emplazamiento, por eso cuenta con sistema de protecciones solares de lamas verticales equidistantes que permiten proteger de la radiación solar y los posibles deslumbramientos al interior del recinto del Hospital”. 

“Lo más desafiante de un proyecto de arquitectura hospitalaria es que requiere un diseño y un desarrollo de alta complejidad esto conlleva retos en cuanto a la coordinación y al diseño integrado de especialidades. Implica un proceso colaborativo entre los diferentes proyectistas de las especialidades vinculadas a la eficiencia energética y la sustentabilidad. Por medio de él, se realiza un constante seguimiento, verificación y asesoría de los proyectos, a través de simulaciones virtuales, cálculos y evaluaciones prescriptivas. “De esta manera, se logran los máximos ahorros en energía, agua, confort ambiental interior y un óptimo manejo de los residuos”, aportó el especialista.

El director del Hospital, Aníbal Lobos destacó también cómo el compromiso con la comunidad Aymara se refleja en la construcción sustentable. “Es un anhelado proyecto, un proyecto que la misma comunidad viene solicitando desde la década del 2000 y hoy afortunadamente ya tenemos un edificio terminado, un edificio que se hace cargo de el medio ambiente al ser un edificio sustentable. El 45% de nuestros usuarios son del pueblo aymara, donde el equilibrio de las energías, de las fuerzas de la naturaleza son propias de su cosmovisión y a través de este premio nos hacemos cargo también de ésta y ahora también de una operación sustentable”, concluyó. 

Aníbal Lobos, director Hospital Alto Hospicio.

En tanto, Osvaldo Carvajal, encargado de Medio Ambiente de Sacyr Ingeniería e Infraestructura Proyecto Hospital de Alto Hospicio, señaló que trabajar con CES tuvo muchas aristas importantes, como la gestión de residuos. El requerimiento apuntaba a alcanzar el 50% de valorización y reciclaje, “lo cual fue conseguido ampliamente, obteniendo alrededor de un 65%”. También destaca las medidas de mitigación ambiental, con reducción de consumo de energía y agua durante toda la etapa del proyecto.

Asimismo, Sergio Fernández, jefe de oficina técnica de Sacyr Ingeniería e Infraestructura. Proyecto Hospital de Alto Hospicio, manifiesta que si bien cumplir con los requerimientos CES fue complejo, también “significó un desafío para la empresa bastante interesante en su ejecución. A medida que en esta obra hospitalaria, se va adquiriendo experiencia, resulta bastante más fácil poder incorporar estos requerimientos en esta ejecución”.

Y dada la experiencia obtenida con el Hospital Alto Hospicio, “podemos decir que es bastante positivo, sobre todo enfocado en el producto final, tanto para los usuarios finales del hospital como para el personal de mantención, que va a poder ver reflejadas bastante optimizaciones en todo el proceso”, afirmó.

La operación

Andrés Dinamarca, subdirector de gestión operacional del hospital, es el encargado de la mantención y operación, se mostró contento de contar con la certificación CES, “ya que nos permite contar con infraestructura de primer nivel y contar con un confort ambiental interno destacado, con una baja generación de residuos y emisiones en la operación del establecimiento”.

“Entre la empresa constructora, con la Dirección de Arquitectura, el Servicio de Salud de Tarapacá, y nosotros como Hospital Alto Hospicio, durante el diseño y la construcción, y ahora en la operación del establecimiento, hemos podido sacar adelante la certificación CES y obtener una calificación destacada, lo que es un desafío no menor para un edificio hospitalario, que tiene una alta demanda energética los 365 días del año, y un logro importante sobre todo para la comunidad, que pocas veces tiene la oportunidad de contar con una infraestructura del nivel que tenemos con este hospital y con esta certificación”, dijo.

Entre los aspectos destacados, Dinamarca enumera los siguientes: protección solar con fachada ventilada, fachada acristalada que permite factor de luminosidad que disminuye energía eléctrica y entrega confort a los pacientes. El sistema de climatización y agua caliente se apoya con energía solar, a través de 60 paneles solares, para disminuir la demanda calorífica de combustibles fósiles. Para el ahorro de agua potable, cuentan con temporizadores en los artefactos, luminarias programables, entre otros.

Asimismo, adelantó que esperan continuar mejorar la certificación CES en la operación del hospital, generando planes para en un futuro obtener el Sello Plus Operación, a través de estrategias como generar los planes de mantención preventiva, para que funcionen de manera eficiente, alianzas con entidades como el municipio de Alto Hospicio y la empresa privada para la gestión de los residuos y reciclaje, avanzando en un convenio de calidad ambiental, que “nos va a permitir manejar nuestros propios residuos y reciclar los de la comunidad y los propios y así seguir en este camino de la sustentabilidad ambiental y energética”, sostuvo.

El primer recinto penitenciario con requerimientos de eficiencia energética en Chile

En Talca se encuentra el Recinto Modelo La Laguna, centro de reclusión en el que se debieron considerar los requerimientos de seguridad que solicita Gendarmería para un recinto de estas características, con los de eficiencia energética.

La región del Maule obtuvo por tercera vez consecutiva el primer lugar de los Premios CES, con el Recinto Modelo Educación y Trabajo Edificios ADE-DEP y ASA-ADI. Ubicado en La Laguna, Talca, a orillas del río Lircay, el centro es un recinto penitenciario donde los internos, tras demostrar cambios en una unidad penal tradicional, llegan para terminar su condena, adquiriendo diversos oficios. 

El centro cuenta con varios edificios de más de 6.950 metros cuadrados de superficie construida total en su conjunto y albergará a 2.320 internos. Talca fue elegida para la realización de este enorme proyecto por el porcentaje de sobrepoblación penal de la región y la antigüedad de los recintos existentes. El proyecto del recinto fue diseñado por luis vidal + architects, construido por Acciona, asesorado por la arquitecta Tatiana Vidal y evaluado por Ecosustenta; y es uno de los recintos penitenciarios más modernos del continente y el más grande del país.

Juan Carlos Barros, arquitecto asociado de luis vidal + architects, oficina a cargo del diseño del Recinto Modelo Educación, compartió que el enorme desafío que ha conllevado este proyecto fue posible por la experiencia internacional del estudio, el cual tiene sedes en España, República Dominicana y Estados Unidos. Barros comentó también que es la primera vez que se construye en nuestro país un recinto penitenciario con requerimientos de eficiencia energética. “Se aplicaron diversos criterios de sustentabilidad y adecuación térmica, según la condición de cada uno de los edificios del complejo, donde el requerimiento de seguridad debía primar ante todo. Fue necesario readaptar las soluciones constructivas de envolvente tomando en cuenta esta condición y cruzarlo con los requerimientos del estudio de eficiencia energética. Para conseguirlo, fue necesario un trabajo intenso junto con el especialista y asesor CES, logrando implementar condiciones dirigidas a la eficiencia y ahorro energético sin olvidar -por supuesto- los requerimientos de seguridad exigidos por Gendarmería”, aseveró el arquitecto.

Subrayó que donde mayormente se pudieron implementar condiciones dirigidas a la eficiencia y ahorro energético fue en el edificio de salud y administración interna y en los edificios del sector externo, que recogen las áreas administrativas, las dependencias del personal y el área de visitas. 

También se implementaron medidas pasivas como el aprovechamiento de la radiación solar y asegurar la continuidad de la envolvente térmica, pero lo más relevante, explica Juan Carlos Barros, fue la integración de medidas activas como instalaciones eficientes, una planta de generación fotovoltáica y paneles solares térmicos. 

Francisca Echevarría de Acciona reconoce que la experiencia de trabajar con CES fue desafiante y enriquecedora, a la vez. Por bases de licitación, tenían que trabajar en dos edificios y lograr un nivel de certificación destacado. 

A su juicio, en el edificio ADE-DEP fue más simple incorporar los requerimientos. Sin embargo, “en el ASA-ADI fue un poco más complejo y desafiante, porque prevalecía la seguridad ante el requerimiento CES”, precisó Echeverría. Especificó que en ASA-ADI lo más complicado fue el trabajo con las ventanas, que si bien son termopanel, “lograr un balance entre la seguridad y la funcionalidad fue complejo, lo que se pudo lograr gracias a una doble hoja de policarbonato, con una cámara de aire interior”. También comentó que lograr la grifería antivandálica y de ahorro de consumo de agua, hizo que el equipo tuviera que investigar más en el mercado, para poder dar con este requisito.

Por su parte, el teniente coronel y oficial de Gendarmería, Edgardo Cañiulef, también demostró su orgullo por el premio y destacó cómo con estas características se genera un mejor clima laboral dentro del centro penitenciario y favorece las condiciones de habitabilidad de quienes residen y trabajan en él. “Estamos muy contentos de tener el privilegio de utilizar este edificio, el confort y las condiciones de trabajo que son las propicias para que el personal de Gendarmería tenga las condiciones dignas y adecuadas para que cumpla con su labor. Y es una labor que, por lo general, es dura, por el tipo de servicio que nosotros prestamos a la comunidad, en la relación y la interacción con nuestros usuarios”, agregó.

Asimismo, Carlos Valverde, inspector fiscal de la Dirección de Arquitectura del MOP de la región del Maule, compartió que la experiencia de certificar el edificio con CES “trae a la edificación pública altos estándares de confort, tanto para el usuario como también permite que en la vida útil del edificio, que en este caso es una cárcel, se incrementa para el Fisco a través de los años de uso que se le dan a este tipo de establecimientos que abarcan 60, 80 años e incluso más. Es un ahorro permanente, establece confort lumínico, de temperatura, acústica y de eficiencia energética en cuanto a consumo de clima, de calefacción”. 

Y agregó: “En específico para este proyecto, nos vimos enfrentados a la dificultad de poder implementar las distintas materialidades que pide poder alcanzar o bien bajar la transmitancia térmica del punto de vista constructivo. Dentro del proyecto contemplamos dos áreas: principalmente la zona interna, que viene a ser el recinto amurallado donde están los internos y la zona externa, que es el edificio administrativo. Y en el área donde están los internos se requirió elevar la seguridad”.

Con dicha separación se decidió certificar el área ASA-ADI de la zona interna y el ADE-DEF para la externa. En la primera, por ejemplo, se resolvió poner un termo panel de policarbonato con un marco metálico de fierro. Esto permitió mantener la seguridad -porque no hay vidrio- y, a la vez, se mejoró la transmitancia. Y en el exterior, se mejoraron los detalles constructivos para asegurar el nivel destacado de la certificación. “Esto llevó a la constructora a asesorarse y a desarrollar de mejor manera las terminaciones y sandwich constructivo. Producto de todas las mejoras añadidas se avanzó en el puntaje de certificación, permitiéndonos llegar al sobresaliente”, añadió Valverde.

“Nosotros como Dirección de Arquitectura del MOP venimos trabajando desde el 2017 en desarrollar documentos que nos permitan elevar al momento de generar la licitaciones, el estándar de las edificaciones. Este premio nos viene a confirmar que vamos por un camino correcto y que tenemos que seguir avanzando por esta línea”, concluyó.

El nuevo Cuartel de la PDI de Puerto Varas ya cuenta con Certificación CES

El edificio de seguridad está conformado por una casona patrimonial y un edificio nuevo de tres pisos, adosado a la primera. Frente a esta particularidad, se construyó una central térmica, losas radiantes y radiadores. 

Próximo a su entrega se encuentra el nuevo edificio de la Policía de Investigaciones de Puerto Varas, el cual considera una inversión de más de 2.500 millones de pesos financiados por el Gobierno Regional de Los Lagos y la Policía de Investigaciones, y con la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas como unidad técnica. 

Está conformado por un inmueble existente de dos pisos -la Casa Heim-, una “Casona” que es patrimonio nacional y un edificio nuevo de tres pisos, que se adosa al primero. 

“Debido a las exigencias que impone la ley sobre la casona, no se permite modificar los espacios existentes ni la incorporación de equipamiento. En consecuencia, las instalaciones que deban ejecutarse efectuarán una mínima intervención sobre tabiques y cielo”, comenta el asesor CES Cristián Huenullan Maldonado, profesional encargado de revisar y asesorar los proyectos de climatización y eficiencia energética de los cuarteles policiales a nivel nacional. 

Hoy, el edificio ya está certificado. Alexandra Stepankowsky Leyton, directora regional de la Dirección de Arquitectura de Los Lagos, comenta que “el proyecto fue licitado por la Dirección de Arquitectura Región de Los Lagos, bajo la modalidad de Pago Contra Recepción. Por lo cual, la empresa constructora debe velar por la contratación dentro del proceso de diseño y ejecución de obras civiles”. También cuenta que la empresa que está asesorando la Certificación CES es Estudio 177 Arquitectura, que estuvo trabajando con la Empresa Constructora LN (la que se adjudicó el contrato). “El proceso ha sido muy satisfactorio, ya que nos permite tener un edificio que cumple los estándares de Edificio Sustentable con el medio ambiente. Permite un mayor confort ambiental en cuanto a la renovación de aire automáticamente y una envolvente térmica que con el tiempo posibilita un mayor ahorro en los costos. Por último, se debe indicar que la calefacción es mediante un sistema de aerotermia, lo que ayuda a calefaccionar el edificio mediante losas radiantes y radiadores en la casona”, especifica la autoridad regional del MOP.

Central térmica

Como cuenta Cristián Huenullán, el sistema de calefacción se basa en una central térmica con dos bombas de calor de similar potencia, cada una cubriendo el 50% del requerimiento. La emisión de calor para la “Casona” es mediante radiadores con controladores por piso. Para el Edificio Nuevo se hará por medio de serpentines embebidos en el radier del nivel 1 y sobre losa del nivel 2 y 3, por los cuales recirculará agua caliente a baja temperatura.

Todos los recintos del cuartel policial se encuentran ventilados de forma mecánica con inyección de aire exterior mediante ventiladores de tipo recuperadores de calor.

Lo que hace el recuperador de calor es utilizar ese aire caliente viciado que se expulsa al exterior para calentar el aire frío que entra, de forma que el aire que entra no esté a una baja temperatura y no enfríe el aire caliente que se encuentra en el interior del Cuartel Policial. Esto hace que las bombas de calor tengan que usar menos energía para calefaccionar.

Esta solución se genera por el problema de calefaccionar con un sistema de ventilador tradicional, debido a que mientras el aire interior está calefaccionado (22°C), el sistema de ventilación tradicional renueva el aire expulsando el aire caliente al exterior e introduciendo aire frío, por lo que la bomba de calor (o central térmica) tenga que gastar más energía para calefaccionar el cuartel Policial. 

Los beneficios que posee este sistema en nuestros cuarteles van enfocados en el bienestar de los usuarios, al generar renovaciones de aire, que ayudan a que este sea más saludable, a la eliminación de bacterias y virus como el caso del COVID-19. En eficiencia energética genera que las centrales térmicas utilicen menos energía para calefaccionar y eso genera un ahorro energético que se verá reflejado en las futuras boletas eléctricas”, explica Huenullán.

Cabe destacar que para que este sistema funcione correctamente, depende que la arquitectura posea una envolvente térmica eficiente para cada zona geográfica. “En el caso de nuestro cuartel, posee una aislación térmica en toda su envolvente (muros, techumbre, ventanas y puertas) con una baja transmitancia térmica, generando que la energía térmica no se pierda mediante su perímetro exterior”, especifica.

Debido a estas estrategias el cuartel se encuentra certificado CES, desde el 22 de mayo de este 2023.

La región Metropolitana iguala a la Araucanía en inscripción de proyectos CES en 2022

Tanto la RM como la Araucanía inscribieron ocho proyectos, seguidos de las regiones de Biobío y Ñuble, con siete cada una. Asimismo, en el recuento de 2022, destacan la actualización del Manual CES versión 1.1, el desarrollo de la versión CES Aeropuertos y otros hitos.

Con 60 proyectos inscritos, 16 certificados y 42 precertificados terminó Certificación Edificio Sustentable el año 2022, con un fuerte énfasis en el segundo semestre, cuando se inscribieron 37 proyectos, equivalente al 62% del año.

De este total, las regiones con más proyectos inscritos fueron La Araucanía y la Metropolitana, con ocho proyectos cada una, lo que “implica un cambio en la tendencia que se había manifestado durante toda la existencia de CES, donde la mayor cantidad de proyectos estaba concentrada en La Araucanía”, explica Hernán Madrid, jefe de CES.

Muy de cerca, siguen las regiones de Biobío y Ñuble, con siete proyectos cada una, por lo que la macrozona Centro Sur (desde Maule a Los Lagos), se adjudica 28 proyectos durante 2022. Por su parte, en la zona norte (de Arica a Coquimbo) hay 12, en tanto que en la zona central (Valparaíso, RM y O’Higgins) hay 11 proyectos inscritos, ocho de los cuales son la RM.

“Hoy es más homogénea la distribución”, cuenta Madrid, quien también destaca que “por primera vez la RM llega al primer lugar de inscripción de proyectos, lo que es una buena señal de la sustentabilidad de los edificios”.

En tanto, en el extremo sur, vale decir, Aysén y Magallanes, existen nueve proyectos inscritos en CES.

Variedad de usos

Otra novedad, como cuenta Madrid, es que por primera vez hay más edificios de oficinas y servicios, con un total de 30; seguidos de 18 de educación, 11 de seguridad (Carabineros, PDI, pasos fronterizos), y 4 de deportes, los que están relacionados con los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos 2023.

En cuanto a los mandantes, la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas continúa liderando la inscripción con 26 proyectos, equivalentes a un 43% del año. Le siguen municipalidades con 16, y mucho más abajo la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) con cinco, el Instituto Nacional de Deportes con cuatro, en tanto que los privados solo inscribieron dos proyectos en 2022. El resto de los proyectos corresponde a la Universidad de Chile, el Serviu e Instituto Teletón.

Entre los edificios certificados en 2022 destacan por su superficie, están el Hospital Alto Hospicio, de la región de Tarapacá, con 39.000 m2 aproximados, y el Centro Penitenciario de Educación y Trabajo “La Laguna”, ubicado en Panguilemo, región del Maule, con alrededor de 7.000 m2. 

Principales hitos

El 2022 fue el año de avances en cuanto a la documentación de CES. Por una parte, se concretó la actualización del Manual CES Versión 1.1 -recientemente difundida-, junto con las mejoras en la plataforma, para incorporar las modificaciones que trae este nuevo documento. Por el momento, el uso de esta versión es de manera opcional y a partir de las inscripciones realizadas desde 1 de abril de 2023 en adelante, su uso será obligatorio, es decir, no se podrán inscribir más proyectos con la versión anterior del Manual CES.

Por otra parte, se comenzó a avanzar en el desarrollo de tres pilotos que configurarán los requerimientos del Manual CES para edificios existentes, los que corresponden a oficinas corporativas para empresas que han estado dispuestas a colaborar con este desarrollo.

“Hemos estado desarrollando, ajustando y calibrando el protocolo para eficiencia energética. Una de las condiciones más complejas de estructurar es la comparación de consumos de energía, lo que se estableció hacer se hace a través de dos opciones: por medio de una referencia en base a información del Ministerio de Energía, como un promedio de consumos de edificios comparables. Esto presenta la dificultad de que la comparativa se puede hacer por condiciones de uso, pero no por nivel de confort”, comenta Madrid.

Y la segunda opción que se establece dentro del sistema de certificación, “es utilizar una referencia del código español, que tiene desagregados por climas que es posible acercar a los chilenos con una aproximación de consumos de energía”, añade el ingeniero.

En ese sentido, la versión de edificios existentes está basada, en general, en una comparación entre una situación actual o anterior del edificio, versus una situación mejorada, por ejemplo, “tomando los consumos de energía, los consumos de agua, las características de calidad de ambiente interior del edificio tal y como está y luego, dentro del sistema de certificación te pedimos que lo mejores en, a lo menos, un 20%. A mayor porcentaje de mejora, mayor es el puntaje, pero el mínimo es 20%”, afirma el profesional.

El Manual CES para edificios existentes estará habilitado para cualquier tipo de edificio, ya sea de diferentes usos y en diferentes climas. 

Por otra parte, durante 2022 continúo el trabajo colaborativo entre la Dirección de Aeropuertos del MOP y CES, que les ha permitido utilizar criterios de la certificación nacional para sus diseños, así como iniciar un trabajo para desarrollar una versión CES Aeropuertos, replicando el éxito que ha tenido la Dirección de Arquitectura con CES.

Se espera tener algunos resultados durante el 2023-24, para contar con esta herramienta que permita estandarizar con criterios de sustentabilidad las edificaciones de los aeropuertos, y avanzar en aspectos relacionados con el área de influencia y operación del terminal de pasajeros, y que esto sea un inicio de un proceso de mejora continua en el aspecto de sustentabilidad en la infraestructura aeroportuaria. 

Premios CES 2022

En 2022, se llevó a cabo la cuarta versión del certamen que lidera Certificación Edificio Sustentable, en la que el Hospital de Curicó y el edificio que alberga a la Prefectura Aconcagua y la 2da Comisaría de San Felipe, compartieron el primer lugar en la categoría “Edificio Certificado”, alcanzando los puntajes más altos hasta el momento.

La ceremonia -realizada en septiembre de 2022- contó con la presencia del subsecretario del MOP José Andrés Herrera, quien llegó a la ceremonia a recibir un reconocimiento entregado por CES, en su calidad de ministro (s) de la cartera. Desde los inicios de CES, la DA del Ministerio de Obras Públicas se ha alineado con sus objetivos y sólo durante 2022 fue mandante de cuatro de los edificios ganadores del Premio CES: el Hospital de Curicó; la Prefectura Aconcagua y Segunda Comisaría de San Felipe; la Fiscalía de Pucón, y el cuartel de Bomberos Segunda Faja de Villarrica. Junto con agradecer la distinción, la autoridad destacó el trabajo de CES y cómo éste se relaciona con los nuevos tiempos.

José Pedro Campos, Carlos Bascou, José Andrés Herrera y Ricardo Fernández.

Asimismo, durante 2022, el equipo CES retomó la agenda de visitas presenciales, postergada debido a la pandemia, que llevó a Hernán Madrid a visitar el Hospital Quillota-Petorca, Hospital de Curicó, oficinas de Colbún, la Prefectura Aconcagua, y otros edificios de Puerto Montt, Castro, Valdivia y Punta Arenas, así como la Feria Batimat y el aeropuerto de Lyon, en Francia.

Durante el primer semestre entregarán comisaría de Carabineros de Curanilahue

Para el primer semestre de 2023 estará finalizada la construcción de la reposición de la cuarta Comisaría de Carabineros de Curanilahue, así lo detalló el Seremi de Obras Públicas en la Región del Biobío, Hugo Cautivo.

Se trata de un proyecto de reposición que busca otorgar mayor comodidad y seguridad, tanto para los vecinos de la comuna como para los funcionarios de la institución.

La construcción del edificio contempla dos pisos de altura donde se albergarán las áreas de carácter policial, tanto operativas como administrativas con una superficie aproximada de 1.651m².

El Seremi de Obras Públicas, Hugo Cautivo, expresó que “esta obra, junto a otras que hemos construido, como en el sector de Nonguén, en Concepción, en Arauco o la que actualmente estamos desarrollando en los cerros de Talcahuano, son una clara demostración que estamos cumpliendo el compromiso de dotar de mejor infraestructura a la institución de Carabineros”.

A su vez, estamos generando más de 50 empleos directos, sólo en este lugar, lo que en definitiva permite que los sectores beneficiados con este edificio logren tener una mejor calidad de vida”.

La modernización de esta unidad también contempla una mejor tecnología, por lo que busca mejorar el servicio a través de una mayor eficiencia en los tiempos respuesta a los requerimientos ciudadanos y una mayor rapidez.

Por su parte, el director de Arquitectura del MOP, Juan Andrés Vega, manifestó que “hoy la obra presenta un 98% de avance físico, lo que quiere decir que la obra gruesa se encuentra terminada y sólo se ejecutan detalles para su término”.

Vega agregó que el edificio cuenta con materialidad de hormigón armado, e incluso el edificio contempla certificación CES”.

La infraestructura tiene una inversión que supera los $3.236 millones y beneficiará una población cercana a las 35 mil personas.

Fuente: Lanalhue Noticias

Obras del nuevo Edificio Municipal de Tierra Amarilla se encuentran en etapa final

Este importante proyecto, ejecutado por el MOP a través de su Dirección de Arquitectura, alcanza un 99% de avance y tiene el objetivo de construir infraestructura acorde a la creciente demanda de la comunidad por más y mejores servicios.

Hasta la comuna de Tierra Amarilla llegó el Seremi Mauricio Guaita Juantok, junto al equipo de la Dirección de Arquitectura, para inspeccionar el avance del nuevo Edificio Municipal de Tierra Amarilla, proyecto emblemático de la comuna que alcanzó una inversión de $7.195.035.414 y que contará con la implementación de mejores servicios, así como la estandarización y dignificación en el cumplimiento de las labores que efectúan los funcionarios y funcionarias municipales.

En el lugar, el Seremi MOP, señaló, “estamos muy contentos con el gran avance que presenta esta importante obra, la que fue construida en 3 niveles, con una superficie total edificada de 3.838 m2, ejecutada por la Unidad Técnica de nuestra Dirección de Arquitectura. El nuevo edificio cuenta con distintos espacios donde se encontrará la Alcaldía, Secretaria de Planificación Comunal (SECPLA), Dirección de Desarrollo Comunal (DIDECO), Dirección de Obras Municipales (DOM), Finanzas, Educación, Tránsito, Servicios Higiénicos, Bodegas, entre otros”.

“La obra contemplo un sistema de plantas libres separadas por tabiques opacos y vidriados, y el volumen esta articulado por un patio de acceso con tripe altura, el cual se vincula con todos los niveles superiores, características que permitirán atender al público en espacios y dependencias acordes  a los requerimientos de la comunidad, mejorando considerablemente las condiciones de trabajo de los funcionarios municipales evitando con ello el actual hacinamiento, entregando así un mejor funcionamiento de las direcciones en un solo edificio Municipal”, agregó el Seremi.

Por su parte el Director de Arquitectura, Claudio Quiroga, indicó, “este proyecto se convertirá en una obra icónica para Tierra Amarilla por su tamaño, modernidad y aporte urbano, potenciando el centro cívico de la comuna y poniendo en valor su plaza de armas como antesala al acceso del recinto, con un inmueble de alto estándar de calidad que estará al servicio “para y hacia las personas” y que con su aporte arquitectónico abrirá nuevas opciones al crecimiento de la comuna”.

En el proyecto, además se destaca la aplicación de Sistemas de Eficiencia Energética Activos y Pasivos, convirtiéndose en un diseño que cuenta con Pre-Certificación CES (Certificación de Edificio Sustentable), reconocimiento técnico que entrega el “Instituto de la Construcción” a las edificaciones que cumplen con altos estándares de confort ambiental.

Guaita señaló, que “la obra se encuentra en la parte final de su ejecución, terminaciones y la puesta en marcha del proyecto de especialidades. Las principales partidas en ejecución corresponden a trabajos asociados a modificaciones, instalación de baldosas exteriores, paisajismo y obras de regadío, limpieza y acondicionamiento de recintos en general”

Para finalizar el Seremi MOP, informó, que “es importante destacar que de manera excepcional a la empresa contratista se le aplicó el “reajuste polinómico”, una de las medidas concretas del gobierno, el cual ayuda a empresas en riego inminente de incumplimiento o abandono de obra, debido al complejo escenario económico que se está viviendo a nivel mundial y que ha mermado de manera importante al sector de la construcción”.

Fuente: Tierra Amarillano

Edificación pública puede disminuir el impacto de la construcción en el cambio climático

La Dirección de Arquitectura participó en un estudio que calculó las emisiones de CO2 durante todo el ciclo de vida de un edificio construido en Punta Arenas que destaca por su eficiencia energética, apreciándose las posibilidades de reducir su impacto dependiendo de la mayor o menor incidencia de factores como el transporte de materiales a la obra o la incorporación de sistemas de energía fotovoltaica.

El Departamento de Construcción Sustentable de la Dirección de Arquitectura participó en un estudio piloto que midió las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de un edificio público durante todo su ciclo de vida, con el propósito de establecer el impacto energético que tienen las fases de construcción, operación y desuso de un inmueble, así como evaluar los potenciales beneficios de incorporar variables que permitan reducir el impacto del inmueble sobre el medio ambiente.

La edificación considerada para esta medición fue el Centro de Día del Adulto Mayor de Punta Arenas, inmueble de 843 m2 construido por la Dirección de Arquitectura y que fue entregado en 2019, el cual ese mismo año fue reconocido como el edificio con mejor puntuación entre las construcciones del país que contaban con la Certificación Edificio Sustentable (CES). Entre otros factores, este edificio destaca por tener una envolvente capaz de soportar los requerimientos climáticos de esa zona geográfica y por contar con un sistema de climatización de bajo consumo energético.

El estudio, liderado por el Instituto de la Construcción y con la participación del MOP y del Ministerio de Energía, se realizó utilizando dos metodologías (RICS y Carbon Leadership Forum) y tres herramientas de cálculo (One Click, Rukaru y Ábaco Chile), las que fueron seleccionadas tras una revisión bibliográfica y evaluación comparativa de varias herramientas metodológicas y de cuantificación en uso actualmente a nivel nacional e internacional.

El análisis del ciclo de vida de esta edificación consideró los gastos energéticos vinculados a la manufactura de los materiales constructivos, su transporte a la obra, la construcción y equipamiento del inmueble y la operación, mantenimiento y reparación del mismo, así como las faenas relacionadas a la finalización de su uso tales como demolición y el transporte, manejo y disposición de los residuos.

De esta forma, considerando una vida útil de 60 años para el edificio, se pudo establecer una emisión total de 1.467 toneladas de CO2 equivalentes. De ellas, el 69% correspondieron a la energía consumida por el edificio durante su fase operativa, el 20% a la producción de los materiales y el 19% al transporte de ellos hacia la obra.

A partir de esta base (definido como Escenario 1), se establecieron distintos escenarios en los que se hacían variaciones de algunos criterios que pueden incidir en una mayor o menor incidencia ambiental del edificio:

Escenario 2: Ampliación de la vida útil del edificio desde 60 a 100 años. En este caso, la emisión total del inmueble alcanzaría a 2.173 toneladas de CO2 equivalentes, representando un 32% de aumento con respecto a la línea base. La etapa operacional del mismo sería aún más significativa dentro del total de emisiones, con un 78%.

Escenario 3Reducción del factor del transporte de materiales a la obra, estableciendo una distancia global de 1.000 kilómetros entre la obra y los lugares de extracción y producción de estos. En esta situación, la emisión de dióxido de carbono se redujo un 10% respecto al escenario base, alcanzando a 1.320 toneladas, gracias a que el factor transporte a la obra disminuyó en más de 58%.

Escenario 4Incorporación de un sistema de energía fotovoltaica capaz de generar el 40% de la energía eléctrica que requiere el edificio para su operación. En este aspecto, las emisiones totales caerían en 14% hasta 1.255 toneladas, principalmente porque las emisiones vinculadas al consumo energético durante la operación bajarían un 38%.

Escenario 5: Lograr energía neta cero mediante incorporación de un sistema fotovoltaico capaz de generar el 100% de la electricidad que requiere el edificio para su operación, además del uso de una bomba de calor en reemplazo de la caldera de condensación. En este caso, al reducirse a prácticamente cero las emisiones de dióxido de carbono durante la operación del edificio (solo habría emisiones por refrigerantes), el total de emisiones se llegaría a reducir en 57% hasta 635 toneladas.

La realización de este estudio resulta relevante en consideración de que el sector construcción es responsable de un 37% de las emisiones de CO2 a nivel global y que existe un compromiso por parte de Chile de reducir las emisiones del sector construcción con el objetivo de alcanzar la carbono neutralidad el año 2050. Con este desafío por delante, una de las primeras acciones a realizar es la definición y disposición de metodologías y herramientas de cálculo de huella de carbono a nivel masivo y alcance nacional para comenzar, lo antes posible, con el reporte de emisiones de CO2 de nuestras edificaciones.

Para profundizar al respecto, se puede revisar la siguiente infografía.

Fuente: DA-MOP

La versatilidad del Centro de Residencia de Discapacidad de la región de Coquimbo

Niños y adolescentes necesitaban convivir en espacios confortables, que les permitieran compartir de manera segura. Por eso, en la reposición del edificio administrativo en Elqui destacan la amplitud, la luminosidad y los sistemas de climatización.

Con un fuerte enfoque en la calidad del ambiente interior se diseñó el nuevo Centro de Residencia de Discapacidad de Elqui, mandatado por el Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia del Ministerio de Desarrollo Social y Familia. Para lograrlo, se consideraron tanto sistemas pasivos como activos que pusieron énfasis en la luminosidad.

Lo anterior era fundamental para generar ambientes confortables y agradables para sus residentes. “A diferencia de otro tipo de infraestructura, en este lugar hay niños y adolescentes. Además, había que considerar el control de la climatización, porque las necesidades van cambiando y la actividad física también varía, de acuerdo con el itinerario de cada día”, explica la asesora CES Daniela Olmos, que trabajó codo a codo con Constructora CGC Ltda. y con el equipo de arquitectura DS2G Consultores, a cargo del arquitecto Dicson Gonzalez, en la etapa de diseño y desarrollo de la obra.

Igualmente, para la arquitecta fueron relevantes aspectos como el acceso visual al exterior, la ventilación natural y la calidad del ambiente interior. “Necesitábamos que todos los espacios fueran confortables desde el punto de vista térmico, visual, lumínico y de la calidad del aire. Además, hay una escasez hídrica importante en el norte, por lo que se hizo un gran esfuerzo para alcanzar cerca de un 50% de ahorro de agua potable, a través de sistemas y artefactos eficientes”, comenta.

Parte de los edificios existentes en Arturo Godoy 2150 tuvieron que demolerse, aunque las características del entorno se conservaron. De ahí que el primer desafío para los responsables del proyecto fuera adaptarse al entorno y a los requerimientos de la certificación. “Un segundo desafío fue desarrollar el proyecto en medio de la contingencia sanitaria, donde el stock de materiales que se había especificado para la certificación y que habían validado los cálculos cambió en el transcurso de la obra. Por lo tanto, hubo que buscar alternativas igual de válidas lo que tuvo un impacto en los tiempos de desarrollo, tanto a nivel proyectual como de ejecución”, sostiene Daniela Olmos.

Otro de los retos que tuvo que enfrentar el equipo era el perfil del usuario que habitaría el edificio las 24 horas del día y también sus particularidades. “Hay niños con movilidad reducida, así como diversos cuidadores”, relata la asesora CES. Asimismo, era complejo predecir la demanda y el consumo energético, debido a la diversidad de los usuarios y la amplia gama de actividades que se realizaban en los distintos espacios.

“Aunque el comedor tenía como objetivo que los niños comieran, éste también era un espacio en el que niños, niñas y adolescentes pasan gran parte del tiempo compartiendo o haciendo tareas. Finalmente, todo el edificio termina siendo su hogar. No era sólo un establecimiento de educación, sino también uno de salud, entonces esa dualidad de usos lo hacía muy diferente. Por eso, debía ser muy versátil”, detalla la profesional.

En el recinto se armaban pequeños grupos de cinco niños y/o adolescentes, que se organizaban como familias junto a sus cuidadores. En este contexto, era necesario generar pequeñas “casas” para que cada núcleo pudiera habitarlas, lo que se logró mediante prueba y error, hasta lograr cuadrar con las dinámicas y las distintas necesidades de los usuarios.

Asimismo, los aspectos de seguridad del edificio tuvieron un papel preponderante por los contextos de vulnerabilidad de donde provenían los niños y adolescentes, que -muchas veces- podrían presentar algunos comportamientos impredecibles. “Tenía que ser un espacio muy seguro, que no tuviera ningún elemento que pudiese generar un accidente”, relata Daniela Olmos.

El resultado de todo el trabajo mancomunado fue un edificio amplio, colorido, luminoso y digno con gran espacio exterior, paisajismo y espacios para hacer deporte. “Encontramos una fuerte incorporación de medidas pasivas, como una envolvente térmica mejorada y una proporción adecuada de vanos en muro, suficiente para conseguir una iluminación natural adecuada y responder a los requerimientos programáticos propios del proyecto”, argumenta el evaluador CES Mauricio Ramírez, de 88 Limitada.

En cuanto a los sistemas, el arquitecto valoró el adecuado balance entre equipos de muy buena calidad y alta eficiencia que, a la vez, son de fácil mantenimiento o reemplazo a futuro para el operador. Mientras que, en lo relacionado con la obra, Ramírez destacó el conjunto de edificaciones muy bien ejecutadas en lo que se refiere a partidas CES y a otras partidas no evaluadas por el sistema, que en su conjunto dan cuenta de espacios de alta calidad constructiva.

“Mediante termografías, anemómetro, luxómetro, termómetro de infrarrojos y otros instrumentos pudimos verificar el correcto funcionamiento de los sistema de climatización, iluminación y ventilación mecánica, así como de un buen desempeño pasivo, tanto en iluminación natural como en transmitancia térmica de muros, cielos y ventanas. Todos los dispositivos relacionados al ahorro de agua, así como el -acotado- paisajismo de bajo consumo estaban también en orden”, cuenta el evaluador CES.

Adicionalmente, el arquitecto valora que la empresa constructora puso a disposición todo el registro digital y en papel de la obra, lo que ayudó muchísimo en la verificación de partidas no visibles o iniciales.

Los hitos de CES y el aporte de la DA-MOP

Por Paola Molina, presidenta de CES.

Sin duda, un hito relevante para CES ha sido la colaboración con la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, la que se ha extendido más allá, logrando la segunda incorporación de los proyectos que ellos gestionan con CES en una nueva emisión de Bonos Verdes Soberanos. 

Esta es una iniciativa que involucra a los Ministerios de Hacienda, Medio Ambiente y Obras Públicas, y en la versión pasada, ya pudimos aportar con la cuantificación de las reducciones de emisiones en la etapa de operación de los edificios CES certificados de la DA-MOP, de modo que formaron parte por primera vez en la segunda emisión de Bonos Verdes del país, aportando con un 38% de los bonos emitidos, equivalentes a 1.180 millones de dólares. 

Por este importante logro queremos agradecer a la Dirección de Arquitectura del MOP por haber incorporado nuevamente a CES como una herramienta de medición y aporte.

También es importante destacar el exitoso convenio de colaboración suscrito entre el Minergía, MOP y CES durante el 2019-2020, que se amplió al 2021, permitiéndonos desarrollar importantes avances en el alcance de nuestra herramienta que hoy ya se encuentran mayoritariamente concluidos.

El convenio suscrito generó, entre otros aportes: 

  • Nueva Plataforma web de CES que se encuentra ya en operación. 

Se desarrolló una nueva plataforma para los procesos de certificación, lo que fue un esfuerzo importante para facilitar el trabajo de asesores, equipos de proyecto y evaluadoras, y al mismo tiempo, permitir un manejo estadístico detallado de la información que se levanta a partir de los procesos de certificación, de modo de poder colaborar con las diferentes instancias de reporte a nivel nacional e internacional. 

  • Aporte a la futura Calificación Energética de Edificios de uso Público, Comerciales y Oficinas. 

En el marco de la Ley de Eficiencia Energética, se plantea la implementación de la Calificación Energética de Edificios de Uso Público, Comerciales y Oficinas. 

Esta calificación completará un núcleo de herramientas locales para el área, sumándose a las ya existentes CEV, CVS y CES.

Para su desarrollo se trazó un programa consistente en tres estudios o etapas, de las cuales la primera y segunda parte fueron desarrolladas en el marco de este convenio y consisten principalmente en el levantamiento de la experiencia internacional, metodologías y modelos de referencia, y en el desarrollo de una herramienta de cálculo para la calificación. 

Las dos etapas concernientes a este convenio se encuentran terminadas.

  • Estudios para la incorporación a la certificación de estándares Net 0 energía y Net 0 carbono. 

Se avanzó en la definición de aplicación del estándar Net Zero energía y net Zero carbono. Para lo que se desarrolló un estudio, basándose en la experiencia internacional y la realidad de Chile. El estudio se encuentra disponible en nuestro sitio web.

También se generó un estudio piloto de huella de carbono, en el Edificio del Centro Día Adulto Mayor de Punta Arenas, ganador 2019 categoría certificación con nivel Destacado con 69 puntos. Se desarrolló una cuantificación de la huella de carbono en el ciclo completo de la edificación, incluyendo materiales y proceso constructivo; comparando un escenario base (edificio con la certificación) y otros que consideraron posibilidades de mejoras. 

Además, se realizó la evaluación de diferentes herramientas de cuantificación y metodologías internacionales, optando por RICS del Reino Unido.

El estudio se encuentra disponible en nuestro sitio web.

Con este trabajo vamos avanzando en generar la información base para poder incorporar a las futuras versiones de CES los criterios de Net 0 carbono y energía.

  • Versión CES edificios existentes. 

Este objetivo surgió a raíz de la necesidad de contar con una herramienta específica que nos permitiera incluir a los edificios existentes en la Certificación.

Esta versión presenta un enfoque diferente a la versión tradicional de CES, ya que se asocia a la mejora en el comportamiento del edificio, tomando como línea base, su propio desempeño. De esta manera, se levanta el comportamiento real y sobre ese nivel se certifica un porcentaje de mejora de al menos 20%.

Actualmente, tenemos disponible la versión preliminar y nos encontramos en etapa de realizar pilotos con el sistema para poder calibrar por lo que los invitamos a inscribir pilotos para la versión de edificios existentes.

  • Actualización de la herramienta CES 1.1. 

Esta versión incorpora: 

  • Una mayor exigencia para la envolvente del edificio. 
  • Se divide con mayor detalle las zonas climáticas.
  • Se incorpora el cálculo de la huella de carbono en la operación del edificio.
  • Se reorientan los requerimientos asociados a energía y agua incorporada, pasando a DAP para todo tipo de materiales o productos.
  • Se incorpora la categoría de Innovación.

La herramienta comenzará a funcionar:

  • A partir del 1 de noviembre de 2022. Donde se habilitará la versión para la inscripción de proyectos de manera voluntaria.
  • Durante el periodo entre el 1 de octubre al 31 de diciembre de 2022 se podrá elegir la versión a utilizar al inscribir el proyecto. 
  • Desde el 1 de enero de 2023 será obligatorio el uso de la versión 1.1.

Sumado al convenio mencionado, el año pasado comenzamos un trabajo conjunto con la Dirección de Aeropuertos del MOP para el desarrollo de la versión CES Aeropuertos. En una primera versión, esta considera los edificios terminales de pasajeros y en la segunda, una ampliación a todo el recinto aeroportuario.

En el trabajo para la primera versión, se calibrarán los requerimientos de consumo de energía, uso eficiente de agua y acondicionamiento acústico, y se ampliará la mirada a temas nuevos dentro del sistema de certificación como: Huella de carbono en el ciclo completo de la edificación, economía circular, y Elementos asociados a innovación que incluyen electromovilidad, uso de hidrógeno verde para vehículos de transporte interno, parámetros de impacto social e infraestructura verde y azul.

Al contemplar todo el camino avanzado desde el año 2015 en que CES entra en operación, nos llena de orgullo contar hoy con más de 500 proyectos trabajando con CES, de los cuales 90 ya se encuentran certificados y más de 200 precertificados, registrándose un constante aumento de proyectos.

CES además de ser un reconocimiento al esfuerzo y logro obtenido por cada equipo en cada proyecto, es una certificación que acredita el aporte a mejorar la calidad de vida de las personas en sus ambientes de trabajo, atención, servicios, deporte, esparcimiento y estudio, donde pasan gran parte del día, impactando positivamente en nuestra sociedad. 

CES reconoce el compromiso de la DA-MOP con la sustentabilidad

Desde los inicios de CES, la DA del Ministerio de Obras Públicas se ha alineado con sus objetivos. Sólo este año, fue mandante de cuatro de los edificios ganadores del Premio CES: el Hospital de Curicó; la Prefectura Aconcagua y Segunda Comisaría de San Felipe; la Fiscalía de Pucón, y el cuartel de Bomberos Segunda Faja de Villarrica.

Paola Molina, presidenta de CES, y Juan Andrés Herrera, subsecretario de Obras Públicas.

La presidenta de CES, Paola Molina, entregó el galardón del Premio CES 2022, a José Andrés Herrera, subsecretario del Ministerio de Obras Públicas, que el día de la ceremonia llegó a recibirlo en su calidad de ministro (s) de la cartera. Junto con agradecer la distinción, la autoridad destacó el trabajo de CES y cómo éste se relaciona con los nuevos tiempos.

“Yo vengo de la minería, fui gerente de proyectos mineros y otros más. Estuve mucho tiempo en obras y recuerdo cuando al principio entrábamos en estos temas, hace 20 años, 15 años, donde todavía, pese a la importancia que tenían los temas medioambientales y de sustentabilidad, había una resistencia por parte de los actores mineros a incorporarlos. Hoy día ya, eso es un desde”, asegura Herrera.

Además, la autoridad valoró -como fortaleza importante- el trabajo en equipo a la hora de conseguir resultados óptimos en la industria. “Ninguna de estas obras la ha hecho una sola persona y es claro que no se pueden hacer estas cosas sin trabajo en equipo; muchas disciplinas, muchos actores públicos, privados y otros más están permanentemente participando para tomar buenas decisiones y sacar adelante un proyecto como este”, resaltó.

Junto con esto, José Andrés Herrera, se refirió a los desafíos que plantea el cambio climático. “Creo que no hay nadie que haya intervenido acá, que no haya reconocido la importancia de considerar el cambio climático como un fenómeno estructural que nos está afectando a todos y todas. Las estrategias -como ustedes saben- que estamos usando, tienen que ver con mitigación y adaptación. Yo creo que debemos avanzar a hacer una cosa mucho más ambiciosa y desafiante que es la estrategia de transformación, no solo de la infraestructura, sino que, de la mano de ella, nuestras prácticas sociales”, aseguró.

Finalmente, el representante de la DA MOP quiso resaltar la labor de los funcionarios de la repartición. “Por cierto, quisiera recibir con mucho gusto, entusiasmo y emoción este reconocimiento que se le hace a la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas. Me tocó recibirlo, pero la verdad es que quien lo merece es cada una y cada uno de los funcionarios y funcionarias del Ministerio de Obras Públicas que trabaja en la Dirección de Arquitectura. Ellos son los que finalmente movilizan las decisiones, los recursos, la energía, las horas extras y el sobretiempo. Ellas son las responsables de que estas cosas se materialicen”, afirmó.