Edificios CES en el sur de Chile bajan consumo de energía hasta dos tercios

Los edificios que albergan a los CECREA de Castro y Valdivia, la Universidad de Los Lagos en Chiloé y la Comunidad Terapéutica de Puerto Montt, lograron altos estándares de eficiencia.

Las cifras no mienten. Comparativamente, los edificios que visitó el jefe de Certificación Edificio Sustentable (CES), Hernán Madrid, este verano, consumen muchísima menos energía que los datos de consumo de energía promedio a nivel nacional que dispone el Ministerio de Energía, considerando su tipo de uso. Esto, pese a estar ubicados en zonas del sur de Chile, donde las características climáticas hacen que la calefacción suela ser más requerida durante el año.

Con un consumo de 31 kwh/m2. año (kiloWatt hora por metro cuadrado al año) y una ocupación cercana al 50% por las dificultades de la pandemia durante el último año, el edificio de la Universidad de Los Lagos en Chiloé es uno de los proyectos más destacados a nivel de consumo de energía del sistema de certificación CES. Más aún, si se toma como referencia el consumo promedio de un recinto educacional que, en 2018, alcanzó aproximadamente 90 kwh/m2. año.

Igualmente, la Comunidad Terapéutica de Puerto Montt, que obtuvo el primer lugar en el Premio CES 2020, solo consumió 58 kwh/m2 en el último año. La cifra es significativamente más baja que el promedio de consumo nacional de los hospitales y oficinas, que alcanzan los 248 y 276 kwh/m2. año, respectivamente, que por sus condiciones de uso puede aproximarse a estas condiciones.

Por su parte, el edificio CECREA de Valdivia totalizó un consumo de 75 kw/h por metro cuadrado; mientras que el recinto que alberga al CECREA de Castro consumió 83 kw/h en el último año, considerando una ocupación cercana al 80% por las dificultades de la pandemia. Estos se comparan con el promedio de consumo de los edificios de oficinas (cercano en tipo de uso) que fue de 276 kw/h según los últimos registros del Ministerio de Energía (2018). 

“Comparativamente, todos estos edificios consumen menos que el promedio nacional. Los CECREA, por ejemplo, gastan apenas un tercio del consumo promedio de energía, aún cuando están en la zona sur en que presenta condiciones climáticas más exigentes. En ellos destaca el uso de calefacción con sistemas de bombas de calor con dispositivos de recuperación de calor”, explica el jefe de CES, Hernán Madrid. 

Igualmente, el funcionamiento eléctrico eficiente en términos de iluminación. Por ejemplo, la Comunidad Terapéutica de Puerto Montt cuenta con lucarnas en gran parte de su superficie, que ayudan a privilegiar la iluminación natural, contando además con circuitos de iluminación sectorizados para encender y apagar según la ocupación.

“Los edificios de la zona sur requieren un consumo de calefacción importante. Por eso, nos alegra enormemente constatar que la utilización de estrategias de arquitectura y diseño lograron reducir tanto el gasto energético”, señala Hernán Madrid. 

CES vuelve a terreno con recorrido por los edificios sustentables del sur de Chile

El jefe de CES, Hernán Madrid, completó una gira que incluyó la visita a cinco edificios certificados desde Valdivia a Chiloé, en la que pudo constatar una reducción en el consumo de energía superior al 50% en cada proyecto.

En Valdivia comenzó la visita del jefe de Certificación Edificio Sustentable (CES), Hernán Madrid, quien inició su recorrido visitando la sala cuna de la Universidad Austral de Chile, un edificio de más de 500 m2 que atiende a cerca de 40 hijos e hijas de funcionarios. “Solo hubo comentarios positivos del lugar, porque la temperatura allí funciona muy bien”, explicó el jefe de CES. 

Posteriormente, Hernán Madrid se trasladó al Cecrea Valdivia, ubicado en la ex estación de trenes de la ciudad.

La siguiente parada fue en Puerto Montt, en el Centro Terapéutico que obtuvo el primer lugar en la categoría “Certificado” de los Premios CES 2020. Este centro clínico mandatado por el Club de Leones y la Universidad Austral de Chile ha estado funcionando a capacidad completa durante los últimos meses. “En términos prácticos, destaca la iluminación natural, pues hay estrategias que permiten trabajar sin luz eléctrica durante buena parte del año, lo que se refleja en las condiciones de quienes trabajan ahí”, afirmó Hernán Madrid.

Dicho edificio, consume del orden de un cuarto de lo que gasta otro edificio de similares características. Igual de eficiente es la sede Chiloé de la Universidad de Los Lagos, que estuvo funcionando parcialmente durante el último semestre. “Es un edificio importante para la ciudad y muy bien logrado. Al conversar con los encargados de operación y mantención de la sede y comparar con otras es considerablemente mejor en sus condiciones interiores de temperatura, ventilación, e iluminación, así como en eficiencia energética”, dijo el jefe de CES.

Sede Chiloé, U. de Los Lagos.

En la Isla Grande de Chiloé, Madrid también visitó el Cecrea de Castro, donde “las condiciones interiores son muy buenas. Es un edificio espectacular, un ícono para la ciudad de Castro. Partió como un museo, simula una ballena y está revestido con tejuelas de alerce”, detalló.

Dicho recinto, que cuenta con una superficie total superior a 4.600 m2, ha estado funcionando todo el año ofreciendo muchas actividades para los niños. “Es un centro abierto con instalaciones para danza, música, trabajo audiovisual y muchos usos. La directora dice que es el mejor edificio de los Cecrea en Chile e incluso tiene vista al mar. Es muy acogedor y funciona fantástico en términos de temperatura”, comentó el jefe de CES.

En términos generales, hemos podido constatar que todos los edificios han cumplido el objetivo con el que fueron diseñados y certificados, entregar buenas condiciones interiores para los usuarios, siendo eficientes desde el punto de vista de consumo de energía. En todos los edificios que visitamos los usuarios destacaron sus condiciones de temperatura interior e iluminación natural, lo que cobra aún más valor considerando los climas de ciudades como Valdivia, Puerto Montt y Castro. Es una alegría enorme para nosotros escuchar los testimonios y comprobar que la incorporación de CES en los edificios cumple su objetivo.