NUEVA INFRAESTRUCTURA MÁS CONFORTABLE Y AMIGABLE CON EL MEDIO AMBIENTE

Por Pablo Canales, arquitecto Departamento de Arquitectura del Ministerio de Salud.

Vivimos el contexto de enfrentar el cambio climático y otras amenazas medio ambientales que se han visto aceleradas por la acción humana. Chile ha comprometido políticas y acciones que permitan a nivel local la adaptación, la mitigación y el cumplimiento de los acuerdos globales, en el marco del Acuerdo de París.

En este escenario, el nuevo Plan Nacional de Inversiones (https://www.gob.cl/inversionesensalud/) presentada por el Ministerio de Salud (Minsal) el pasado mes de agosto, incorpora criterios de sustentabilidad para el diseño, ejecución y operación de los nuevos hospitales y establecimientos de atención primaria, con el objetivo de disminuir los impactos medio ambientales que lleva consigo el ciclo de vida de las edificaciones. De este modo, la nueva infraestructura contará con eficiencia en el consumo energético y de agua potable, y con lineamientos para la reducción de los residuos y emisiones de gases efecto invernadero en su construcción y operación.

Para lograr un alto rendimiento energético, cada edificación se diseña según las características climáticas de la localidad donde se ubica, siendo la arquitectura y la implementación de una envoltura térmica de alto rendimiento (sistemas pasivos), los factores claves en la eficiencia energética de los establecimientos. Asimismo, todos los sistemas activos, como luminarias, climatización, ventilación, entre otros, son de alto rendimiento energético y cumplen con estándares internacionales de eficiencia. A esto se suma la implementación de sistemas de energía renovables, por ejemplo, paneles solares térmicos, fotovoltaicos y sistemas de geotermia, en donde las condiciones locales permitan complementar los consumos energéticos. Por su parte, la reducción en el consumo de agua es otorgada gracias a artefactos sanitarios y sistemas de riego de alta eficiencia, que cumplen con los requerimientos nacionales e internacionales en materia de sostenibilidad.

Este trabajo no es nuevo, ya desde el año 2007, Minsal ha incorporado criterios de eficiencia energética y del recurso hídrico de manera integral en sus proyectos. Entre los primeros establecimientos con estos lineamientos se tienen los hospitales de Hanga Roa, Rancagua, Puerto Montt y Talca, los cuales se desarrollaron con una especialidad dedicada a estos estudios durante la etapa de diseño. Estos proyectos incorporaron estrategias en el diseño para reducir los consumos energéticos y de agua, así como la implementación de sistemas de energías renovables no convencionales, tales como geotermia, paneles solares térmicos y fotovoltaicos, considerando los sistemas del edificio como un todo.

En esta nueva generación de hospitales se han registrado importantes reducciones en los consumos energéticos y emisiones de CO2 respecto a los establecimientos construidos antes del 2007. De acuerdo con datos del Ministerio de Energía, en los nuevos hospitales se han obtenido consumos energéticos que representan un 50% menos que los registrados en los hospitales existentes por metro cuadrado de superficie edificada.

La incorporación de criterios de sustentabilidad no solo tiene un beneficio medioambiental, ya que en su aplicación está implícito el concepto de calidad del ambiente interior. Así, el diseño de la infraestructura de salud cumple estándares nacionales e internacionales que mejoran las condiciones de habitabilidad de los usuarios, en aspectos como temperaturas de confort, ingreso de luz natural y calidad del aire. El mejoramiento de la calidad ambiental interior, tiene beneficios directos en el bienestar de los funcionarios y en la recuperación de los pacientes, por lo que es un aspecto relevante que se considera en la nueva infraestructura de salud.

Actualmente, la Certificación Edificio Sustentable versión Hospitales (CES), implementada desde el año 2017, ha abierto un nuevo parámetro de estandarización nacional en el sector de salud. Su desarrollo ha sido en consenso con los criterios del Ministerio de Salud y se ha enfocado en las necesidades propias de nuestro contexto nacional. Entre sus virtudes, está el mejoramiento de los estándares arquitectónicos pasivos, la aplicación de estándares de ventilación internacionales y las herramientas de gestión de la operación y mantenimiento del edificio, contribuyendo, además, en la mejora de la calidad del ambiente interior de los recintos. Hasta la fecha, se cuenta con dos proyectos hospitalarios de distintas complejidades en proceso de ser certificados: Hospital Quillota Petorca y Hospital Provincial de Curicó. En tanto, otros diez están incorporando este método nacional en su diseño: Hospital de Puerto Varas, Hospital de Linares, Hospital Sótero del Río, Hospital Provincial Cordillera, Hospital Alto Hospicio, Hospital de Melipilla, Hospital de Buin-Paine, Hospital de Constitución, Hospital de Cauquenes y Hospital de Parral.

Mediante la implementación de esta certificación y diversos criterios de diseño en sustentabilidad es que se busca contar con una nueva infraestructura de salud más amigable con el medio ambiente, confortable y alineada con los acuerdos internacionales que ha suscrito nuestro país en materias de cambio climático.